Hora : 11:55
Lugar : Mi casa
Estado : Aún más dormida
¡Ya solo queda un día! Que nervios...Aún lo tengo todo sin hacer. He metido todo en las maletas a ver si por arte de magia se cierran ellas solas pero no se que me da que no va a funcionar, y aparte, mi madre entró a las 9 de la mañana a despertarme diciéndome que se ha estropeado la secadora. Por supuesto, ya no me dormí, y es que tampoco dormí bien.
Todo se remonta a una tarde de domingo en la que decidí ponerme a ver una película llamada Despertares...No, ahora, en serio. Es una película preciosa que recomiendo verla, eso si, llorareis, y si no llorais, sois unos insensibles. Trata sobre un doctor que comienza a trabajar con pacientes con enfermedades crónicas, entre los cuales se encuentra un grupo de personas que están como muertos, en estado vegetativo, mirando al vacío, sin poder hablar ni expresarse. Todos estos cayeron enfermos en la década de los años 20 (la película se sitúa en 1969). Pues bien, este doctor comienza a investigar y decidi probar una nueva droga con ellos, y poco a poco empiezan a despertarse (de ahí el nombre de la película). Muchos de ellos eran niños cuando cayeron "dormidos" y cuando despiertan siguen con la mentalidad de aquella, es como si solo estuvieran dormidos. Y bueno, podéis imaginaros como acaba al final para que yo acabe llorando como una descosida y no pieda dormir. Además, todo esto sucedió en la realidad (podéis mirarlo en la wikipedia si no me creeis).
Es después de este tipo de películas cuando me doy cuenta de lo afortunados que somos y que poco lo apreciamos.
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